Miquel Àngel Llonovoy

Informe d’UOB sobre la reestructuració laboral a Bankia

Després de constatar que cada sindicat de Bankia fa el seu informe per independent (tot i no ser, en la nostra opinió, el més adient per a la unitat d’acció que d’altra banda pretenen), us acompanyam transcripció de la versió pública de informe preceptiu (art. 64.5 ET) d’Unió Obrera Balear sol·licitat per la Direcció Corporativa de Persones de Bankia, S.A. a la Comissió Negociadora de la reestructuració laboral derivada de l’absorció de BMN.


 

En respuesta a su comunicación de día 11 de los presentes –de solicitud de informe preceptivo del expediente de Bankia, S.A. para el supuesto de restructuración de plantilla (art. 64.5 ET) puesta en marcha tras la absorción de Banco Mare Nostrum, S.A. (BMN)–, Unió Obrera Balear (UOB) emite el siguiente informe (que podría ser ampliado tras la revisión de documentación concertada en Madrid para el próximo lunes 22 de enero).

Informe

Irregularidades en la Constitución de la Comisión Negociadora

  • Durante la constitución de la Comisión Negociadora se ha producido una vulneración de derechos fundamentales de las formaciones sindicales minoritarias, al no permitirse a estas contar con un asesor propio en dicha Comisión. Si en algún momento de la negociación que se lleva a cabo en Madrid, este sindicato –con sede y mayoritario en Illes Balears, tanto en votos como en número de delegados en la empresa– necesita de asesoramiento jurídico in situ, la configuración pactada por la mayoría sindical y la empresa obstaculiza ese derecho. La empresa estableció un máximo de asesores y los sindicatos mayoritarios tuvieron a bien repartirse ese número máximo recurriendo al invento de cuotas fraccionarias de asesor.
  • También durante la constitución de la Comisión Negociadora se ha producido otra irregularidad: por los motivos expuestos en el punto anterior, UOB comunicó por escrito y con antelación suficiente a Bankia, S.A. y a todos los sindicatos su intención de suscribir el acuerdo de representatividad mediante la fórmula: “UOB se somete al criterio mayoritario de la representación laboral manifestando su disconformidad con la configuración de asesores”. No se obtuvo respuesta alguna hasta día 11 de enero (fecha de la constitución formal de la Comisión e inicio del período de consultas), en que:
    • En una reunión intersindical previa, los sindicatos ACCAM y CCOO se opusieron a que UOB dejara constancia de discrepancia alguna con la configuración de asesores, bajo amenaza de exclusión total de la Comisión Negociadora.
    • En la reunión formal con Bankia, S.A., la empresa, monopolizando el acta, como antes hicieron los sindicatos mayoritarios ACCAM y CCOO en la reunión previa, no permitió que figurara en la misma la aceptación con manifestación de disconformidad con la configuración de asesores establecida por las partes.

Cierres de sucursales extemporáneos e injustificados, solo para crear la afectación laboral

  • Bankia, S.A. decidió, comunicó (e incluso llevó a cabo) cierres de centros de trabajo (sucursales bancarias) con anterioridad al inicio del proceso de despido colectivo. Son 145 sucursales en toda España, 35 en Illes Balears durante los meses de diciembre 2017 y enero y febrero de 2018.
  • Dichos cierres de sucursales no están justificados y perjudican la marcha del negocio, por lo menos en Illes Balears. Solo en Illes Balears, el grupo de oficinas bancarias cerradas a 15 de enero de 2018 acumulaba a 30 de noviembre de 2017 un margen analítico y de explotación anual del orden de millones de euros. Bankia, S.A., con estos cierres, lleva a cabo una política de ‘cerrar por cerrar’ o, más bien, creemos que persigue el propósito nada neutro de generar el perímetro de afectación laboral (187 puestos de trabajo solo en Illes Balears –la provincia más afectada–, 847 en todo el Estado), criterio que deviene el principal “criterio de selección de los trabajadores afectados cuyos contratos de trabajo van a ser extinguidos”, según la documentación entregada.
  • Illes Balears es la provincia que va a sufrir más cierres de centros de trabajo, pese a ser la comunidad autónoma (uniprovincial) referente en toda España en crecimiento del PIB (vid. página 5 del documento “Bankia-BMN Presentación de la operación”, de 8 de enero). Nos oponemos al cierre de centros de trabajo rentables, máxime en un territorio económicamente potente y dinámico.
  • El criterio de 800 m de distancia entre sucursales que figura en la memoria del despido colectivo como justificación de cierre no conjuga con los cierres que se llevan a cabo en Illes Balears. Por ejemplo, en los siguientes casos: Polígon de Marratxí, Son Caliu, Pla de Na Tesa, Polígon Son Castelló, Magaluf, Establiments, Son Roca y Es Rafal Nou. Por otra parte, parece ser un criterio parcial, puesto que, por ejemplo, en la ciudad de Murcia, una vez realizada la consulta sobre el mapa, se observan diversos centros de trabajo acumulados a una distancia menor que la usada en Palma.
  • En cuanto al criterio de Marco de Asignación de Recursos (MAR) usado para recortar puestos de trabajo en BMN, debemos decir que nos lleva a una injusticia flagrante. Se usa el rasero de Bankia para medir sucursales que no han dispuesto de las herramientas tecnológicas, procesos de negocio, cartera de productos, etc., de Bankia, sino las de BMN, a todas luces inferiores en calidad y competitividad. Las oficinas de BMN en Illes Balears, por culpa de la política de tierra quemada de la dirección de BMN, avalada por el FROB, vieron drásticamente reducida su capacidad competitiva desde que la dirección de Caja Murcia decidió retroceder en el tiempo tecnológica y operativamente hasta tiempos y formas de trabajar que ya no se recordaban en la banca balear. El resultado de la mala gestión directiva de años pasados, en un territorio tan bancarizado como este, ha sido muy perjudicial para el negocio y ahora tiene una repercusión negativa sobre las cifras MAR y las pretendidas amortizaciones de puestos de trabajo. En buena lógica y justicia, la aplicación de criterios MAR debe posponerse hasta que haya pasado un plazo razonable de adaptación y estabilización, con posibilidades de creación y recuperación de negocio, y compitiendo en igualdad de condiciones.
  • Los recortes planteados por Bankia constituyen un ‘más de lo mismo’ del que ha sido la política de cierres de centros de trabajo (sucursales) durante siete años de existencia de BMN, estrategia que se ha demostrado estéril para recuperar la cuota de mercado que mantenía Sa Nostra en Illes Balears. Más bien al contrario, la política arbitraria de cierres de sucursales inicia una hemorragia de confianza entre la entidad y la histórica y fiel clientela de Illes Balears. Dicha confianza y prestigio no se recuperará continuando con el cierre masivo y sostenido de sucursales.
  • Los cierres de sucursales representan un retroceso en atención al cliente. La voluntad de Bankia, S.A., expresada en la memoria, de “eliminar procesos de bajo valor añadido” nos tememos que significa volver la espalda a cierto perfil de cliente de caja de ahorros que no interesa a la gran banca.
  • Sobre las cifras de red minorista pretendidas para la entidad resultante se constata que la media de trabajadores por oficina en Bankia, S.A. es de 4,9. En Illes Balears se sitúa, con 4,6 trabajadores de media, en la posición 25ª de todas las provincias donde Bankia está presente, situación no concordante con el dinamismo de la economía de estas islas, en relación con la de otras provincias. En Murcia la media se sitúa en 5.5, lo que representa un trabajador más por cada sucursal. Volvemos a constatar un trato de favor muy sospechoso para con un territorio determinado en detrimento de otros territorios. No hay equidad.
  • Sospechamos que Bankia se ceba en el cierre de sucursales en Illes Balears más que en otros territorios porque quiere llegarse a un determinado número de despidos en las islas y el recorte laboral máximo en servicios centrales (ya saqueados en tiempos de BMN mediante los acuerdos de externalización en fraude de ley) no da para tanto.

Irregularidades laborales sobrevenidas

  • Los trabajadores de las oficinas cerradas a 15 de enero de 2018 no han recibido comunicación escrita de su nuevo centro de trabajo de destino. Es más, cuando la han solicitado, según costumbre, la empresa les ha negado dicha comunicación escrita y dice que a partir de ahora será verbal. Entendemos que se trata de una práctica abusiva que limita el derecho de defensa ante posibles desplazamientos irregulares y movilidades geográficas. De no remediarse, deberemos ponerlo en conocimiento de la Inspección de Trabajo y Seguridad Social.
  • Bankia, S.A. considera puestos de trabajo amortizados aquellos que corresponden a trabajadores en excedencia legal –situaciones especialmente protegidas por la Ley, como el cuidado de hijos o de ascendientes–, o pactada –derivados de acuerdos previos en BMN–. En el segundo caso, debemos recordar la máxima Pacta sunt servanda. El primer caso, por su parte, es especialmente grave, pues lo que se pretende es contabilizar todos los casos de trabajadores en situación de excedencia legal para provocar el despido, no el de los trabajadores excedentes, pero sí de otros, en un número equivalente al primero. Sin comentarios.

Documentación facilitada incompleta y falta de actuaciones inmediatas para la mejora del negocio desde los servicios centrales

  • La documentación facilitada hasta la fecha no aclara la afectación en las sedes territoriales de los servicios centrales.
  • En todo caso, entendemos que deberían mantenerse todos los puestos de trabajo existentes actualmente en los servicios centrales de Illes Balears, que ya pasaron por la restructuración de BMN. Todos ellos son puestos que aportan un especial valor añadido a las direcciones respectivas, por el conocimiento atesorado a lo largo de años de experiencia y por el hecho diferencial insular que afecta a todas las áreas de negocio.
  • Notamos a faltar un plan estratégico, o un avance del mismo, que vislumbre las fortalezas de cada territorio y ponga en marcha acciones en cada dirección territorial que podrían favorecer el empleo y no destruirlo en el momento actual. Nos referimos, por ejemplo, a la creación de grupos de trabajo de multicanalidad (que puedan recibir trabajadores procedentes de una movilidad funcional), así como otros que la dirección territorial de Illes Balears podría liderar, como los de negocio turístico, o coliderar, como la atención al sector de no residentes.

De las causas justificativas del expediente

  • Nos oponemos a las pretensiones de Bankia, S.A. que, según se desprende de memoria quiere:
    • “Aumentar la eficiencia” exclusivamente sobre la reducción de costes, los cierres de centros de trabajo, el despido de trabajadores…
    • “Avanzar en la plena privatización maximizando el retorno de las ayudas públicas”. UOB entiende que no debe seguir cargándose la factura de la crisis financiera provocada por la mala gestión directiva y de las autoridades económicas y de vigilancia y tutela, a los trabajadores. UOB ha denunciado en innumerables ocasiones la mala gestión directiva de Sa Nostra (primero) y de BMN (después). Tanto el FROB como el ministro señor De Guindos mantuvieron al frente de BMN y a ultranza, al señor Egea y a su equipo de Caja Murcia –al contrario de Bankia, donde hubo sustitución de las cúpulas directivas–; y BMN, un banco (no una caja de ahorros) ha naufragado. No puede pretenderse, nuevamente, achacar a los trabajadores los efectos de la mala gestión directiva. La responsabilidad ahora ya es de los accionistas y, concretamente, del FROB –máximo accionista de Bankia y antes también de BMN–, por haber avalado la dirección de BMN. Las políticas de BMN para con el territorio de Illes Balears han sido nefastas y han conducido a la pérdida continua de clientes y de negocio. La responsabilidad es del FROB y de todos aquellos que idearon, votaron, ejecutaron y aplaudieron la bancarización de las cajas.
    • “Centralizar” actividades. Si con ello se pretende afectar a la ya mermada estructura territorial de los servicios centrales, ello es incoherente con la también pretendida “optimización en el uso de la tecnología”.
    • Con la política Marco de Asignación de Recursos (MAR), acumular cada vez más volumen de trabajo en más pocas manos, provocando más presión comercial y estrés en el trabajo.
    • “Aplicar las mejores prácticas”. ¿BMN no las aplicaba? Y si no era así, ¿por qué el FROB lo permitía y mantenía en su cargo a la dirección de BMN – Caja Murcia?

De las medidas de movilidad en Illes Balears

  • UOB entiende que, en aras de salvaguardar el empleo, hay que favorecer las medidas de movilidad funcional, también en el territorio de Illes Balears. No compartimos, por consiguiente, las afirmaciones de la empresa, según las cuales pretende acomodar a su discreción la movilidad funcional pactada en la norma convencional, poniendo impedimentos a la misma según el perfil de los trabajadores. Una formación adecuada (y nos consta que el departamento de formación de Bankia funciona a pleno rendimiento) puede solventar cualquier carencia de los trabajadores, que podrán (y querrán) salvar su empleo a través de una movilidad funcional.
  • Es del dominio público la lamentable situación de las infraestructuras de comunicación por carretera y ferroviarias en Illes Balears, para nada comparables a las de la península. Las medidas de movilidad geográfica que se pretendan aplicar a trabajadores insulares deberían tener como límite en kilómetros una cifra coherente con esa situación, substancialmente inferior al límite general que se establezca para la península. Por otra parte, una movilidad geográfica que sobrepase los límites geográficos de una isla, para un trabajador insular representa la gran mayoría de ocasiones una extinción contractual. Así quedó demostrado en los autos STS 716/2016 instados por UOB contra BMN y otros, en los que quedó “acreditado, hasta la saciedad, que la finalidad perseguida por las empresas no fue nunca la de garantizar los empleos, sino todo lo contrario”. Ningún acuerdo colectivo debería levantar la protección establecida en el Convenio Colectivo de respeto a los límites geográficos de una isla ante una movilidad geográfica. En su caso, el Convenio Colectivo permite los acuerdos individuales, a los que Bankia, S.A. puede recurrir si lo estima oportuno, y en los que empresa y trabajador pueden llegar llegar a una conciliación de intereses.

La armonización, ¿moneda de cambio de despidos?

  • Desde el proceso previo auspiciado bajo la Disposición Adicional Segunda del Convenio Colectivo de Cajas, llevado a cabo en diciembre 2017, Bankia S.A. manifiesta a los sindicatos que las condiciones del despido colectivo y las de la homologación de condiciones salariales y sociales estarán correlacionadas y que, desde el punto de vista de los trabajadores, cualquier mejora en unas redundaría en un empeoramiento en las otras. UOB entiende la armonización de condiciones como una oportunidad para fomentar la cultura de empresa en Bankia, S.A. una vez absorbido BMN. Dentro de una misma empresa es razonable tender a una igualación pactada de las condiciones de trabajo de todos los trabajadores. Pero Bankia plantea una armonización inmediata para las condiciones que empeorarían las de BMN –como el horario–, y otra diferida para aquellas que mejorarían –como el salario–. No es razonable. Al mismo tiempo debemos recordar que en este momento no estamos ante un despido colectivo por causas económicas, por lo que no compartimos una armonización asociada al despido colectivo con absorciones de complementos, suspensiones de aportaciones por pensiones, etc. Entendemos que la negociación de armonización de condiciones de trabajo podría trasladarse unos pocos meses adelante en el calendario, hasta haber avanzado en la integración operativa y funcionar como una sola plantilla.
  • La empresa propone la absorción y compensación del Complemento Salarial de Fusión de BMN según figura en el acta del proceso de 15 de enero. En dicho complemento se acumularon pluses procedentes de las cajas que formaron BMN que en su día eran revalorizables e, incluso, pensionables. Su objeto era homologar salarialmente la plantilla de BMN durante las sucesivas subidas salariales derivadas del Convenio Colectivo de Cajas y, dicho sea de paso, benefició en mayor medida al colectivo procedente de Caja Murcia. Cualquier cambio al respecto de este complemento debería ser analizado y, en su caso, pactado en el marco de la armonización de condiciones salariales y laborales.

Del bloqueo de las negociaciones por la parte empresarial

  • Pese a las peticiones de la representación laboral, hasta la fecha la empresa no ha realizado ninguna oferta a los trabajadores que podrían estar interesados en una extinción contractual debido a su edad. Más bien al contrario, se ha dedicado a incrementar la presión sobre la negociación, especialmente sobre los trabajadores más jóvenes, con los cierres de sucursales previos al inicio del proceso. No alcanzamos a ver buena fe negocial por ninguna parte.
  • Los criterios de selección rezan que la empresa puede rechazar la adscripción voluntaria, cosa que contradice sus propias palabras al respecto de permitir cualquier voluntariedad en las desvinculaciones dentro del expediente.
  • Uno de los criterios de selección para las extinciones se basa en “Evaluaciones del desempeño, especialización, polivalencia e idoneidad para el desempeño del puesto de trabajo”. Manifestamos nuestra oposición a criterios arbitrarios y subjetivos como los mencionados.

Por todo lo anterior, UOB emite informe desfavorable a la restructuración de plantilla pretendida por Bankia, S.A.

Nos oponemos a las amortizaciones de puestos de trabajo desproporcionadas, y a los criterios de cierre y reducción de estructura, injustos en el momento actual, y que no casan con la realidad de Illes Balears, lugar donde una gestión directiva competente debería ver oportunidades para hacer crecer el negocio y, por ende, el empleo, no para recortarlo. Este proceso que se nos plantea es otro paso más en la privatización del sistema de cajas y de la rendición de sus históricas redes de sucursales, convenientemente maquilladas, libres de costes laborales y de clientes no interesantes, a la gran banca.

Unió Obrera Balear

(Fotografia: Miquel Àngel Llonovoy)